Desde el pasado año, a consecuencia del COVID-19, sufrimos una desaceleración, incluso paralización, de nuestra economía, lo cual está afectando gravemente a todas las empresas y comerciantes, con independencia del sector en el que desarrolle su actividad.
Ante esta situación, muchos empresarios necesitan apoyo para atenuar o protegerse de las consecuencias negativas derivadas de este escenario de crisis, desconociendo en muchas ocasiones que tienen a su disposición diversas herramientas legales en el ámbito concursal para ayudarles: el concurso de acreedores y varias soluciones preconcursales.
¿Qúe es un concurso de acreedores?
Antes de nada, debe conocerse que existe un deber para cualquier persona -física o jurídica- que mantenga deudas con sus acreedores, y no pueda cumplir regularmente con el pago de las mismas, de solicitar la declaración de concurso de acreedores ante los tribunales.
Es un procedimiento judicial a través del cual se busca una solución para los acreedores del empresario ante una situación de incapacidad de pago por parte del mismo, y, también, es un medio de protección para el propio empresario, pues, quedando libre de responsabilidad al cumplir con dicha obligación legal de solicitud del concurso, además, le puede ayudar -en la medida de lo posible- a conservar su actividad comercial y puede servirle de escudo protector frente a ejecuciones o embargos.
Declarado el concurso de acreedores, se prevén dos formas de finalización del mismo para el empresario: el convenio, una solución que surge del acuerdo entre el deudor y sus acreedores para saldar las deudas, y la liquidación, que conlleva la realización de los bienes y derechos del concursado para el pago de los acreedores, liberándose tras ello al deudor.
¿Tiene un empresario otra posibilidad de solucionar los impagos de deudas?
Asimismo, en la legislación vigente existe a favor de los empresarios y comerciantes otras soluciones denominadas medidas preconcursales, dirigidas, principalmente, a facilitar la reestructuración de deudas (en sus diversas modalidades, entre otras, quitas y/o esperas); a financiar la tesorería indispensable para la actividad; a reducir costes de cualquier naturaleza; e, incluso, a facilitar la reestructuración de la propia empresa o actividad comercial.
Estas medidas indicadas, que ayudan a esquivar una futura y previsible insolvencia, se concretan en: (i) propuesta anticipada de convenio, que facilita la apertura de negociaciones con los acreedores para solucionar situaciones de quiebra (ii) el acuerdo de refinanciación, bien colectivo o singular, como herramienta de refinanciación y reestructuración de deudas, o, (iii) los acuerdos extrajudiciales de pagos.
Si su empresa o negocio se encuentra en alguna de las situaciones descritas, no dude en ponerse en contacto con SURCO LEGAL. Nuestros profesionales, con amplia experiencia y expertos en la materia, les atenderán para resolver cualquier duda que tengan al respecto y asesorarles debidamente.
